Cómo lacar puertas difíciles con poco tiempo

 Aquí tienes una guía paso a paso para lacar puertas difíciles con poco tiempo: 

1. Preparación

Retira manillas y bisagras: Antes de comenzar, quita las manillas y bisagras de la puerta. Si es posible, coloca la puerta en sentido horizontal para evitar gotas marcadas.

Protege los bordes: Cubre los bordes de la puerta con cinta de carrocero para protegerlos durante el proceso.

2. Lijado

Lija la superficie de la puerta minuciosamente para eliminar impurezas como restos de pintura o barniz. Utiliza diferentes granos de lija según tus necesidades:

• Grano hasta 50: Para retirar pintura antigua.
• Grano hasta 80: Para alisar la superficie.
• Grano hasta 120: Para eliminar residuos de cortado.
• Grano hasta 180: Para dar una pasada antes de terminar.
• Grano hasta 250: Para detalles en materiales delicados.
  
  

Limpia la puerta a fondo después de lijarla.

3. Imprimación

Aplica una capa de imprimación para preparar la superficie antes del lacado. 

4. Aplicación de laca o esmalte

Las partes más rugosas (resaltes, molduras, adornos) se pueden lacar con una pequeña brocha.

Las superficies más lisas se cubren con laca y un pequeño rodillo específico para lacar o esmaltar.

Realiza pasadas continuas, pisando el extremo de la pasada anterior con el rodillo o la brocha.

5. Capas y secado

Aplica al menos dos capas de laca, alternando entre pasadas horizontales y verticales.

Deja secar completamente entre capa y capa.
 

Con estos pasos, podrás lacar puertas difíciles con poco tiempo y obtener el resultado deseado. Si necesitas más información, ¡Ponte en Contacto con nosotros! Estaremos encantados de ayudarte.